Cuatricromía
Por Carmen
Alarcón Collignon
Al pensar y recapacitar en la impresión a cuatro colores,
se hace imperioso saber que los colores de la naturaleza que distinguimos, son
los colores luz; esos colores que advertimos a diario tanto en todo lo vemos en
el entorno como en el monitor de la computadora o en la televisión, en el cine,
etc. Estos colores son: el rojo, el verde y el índigo o azul, que por sus
siglas en inglés son conocidos cómo el sistema de color RGB: red, green and blue, estos y toda la
gama tonal que de ellos se derive y que podamos percibir de acuerdo a la
sensibilidad de nuestra visión.
Así hallamos que la luz perceptible por el ojo humano
puede descomponerse en tres colores básicos o primarios: rojo, verde y azul, y
en tres complementarios: magenta, amarillo y cian. Las mezclas de estos colores
permiten que el ser humano perciba los tonos derivados de ellos hasta el límite
de su capacidad visual.
Sin embargo se debe apuntar que estos colores luz son
imposibles en el mundo de la impresión, ya que se basan, esencialmente, en la
luz; y en la impresión el principio es la tinta o pigmento, por lo que el
sistema de color para la impresión será a partir de los complementarios del
espectro lumínico, los que se llaman: colores pigmento y son: magenta, amarillo
y cian, los complementarios de estos son: el rojo, verde y azul, sistema
conocido como CMYK.
Los sistemas para mezclar colores que distinguimos son:
el de adición que abarca los colores luz y el de sustracción que se refiere a
los colores pigmento y es el que pretendemos comprender. En base a lo anterior,
razonamos que este sistema se conoce como de sustracción, porque al mezclar dos colores pigmento se va restando
luz al color resultante hasta crear el negro. Debo aclarar que el blanco es la
suma de los colores luz y el negro es la ausencia de la misma. Es importante establecer que el soporte del
papel es el que representa la cantidad de luz que se suma al color pigmento,
por esto a más blanco el papel, mayor cantidad de luz y que la sustracción de
ésta la haremos mediante la mezcla de los colores pigmento o tintas.
En el grabado artístico, sobre lámina de metal, la
separación a color es conocida como Multiplate, el artista concibe una
placa por cada tono de la cuatricromía, sabe los resultados que pretende, pero
no tiene una imagen que repetir, sino que ésta se halla inmersa sólo en su
imaginación; por lo que debe conocer a fondo el sistema de separación de color
para que al realizar cada plancha los resultados sean agradables a la vista.
Así, el grabador, elabora cuatro placas con la porción de la imagen que
necesitará determinado color; si requiere un verde intenso, tendrá que meter al
baño de acido una lámina con amarillo y otra con cian, al igual que si pretende
conseguir un tono de marrón rojizo, deberá elaborar tres planchas: una con
cian, otra con magenta y finalmente la lámina amarilla, siendo la magenta la
que más tiempo de baño en el ácido deberá tener; a esto el artista le agrega la
plancha denominada matriz, que se entinta en negro; generalmente es la que
lleva el dibujo en aguafuerte, las distintas calidades de aguatinta que darán
el volumen al grabado final y las técnicas con que el grabador ha decidido
abordar su trabajo; no por esto, las planchas a color no pueden ser tratadas
con técnicas distintas al aguatinta, que suele ser el proceso que se utiliza
para el Multiplate.
En otras prácticas de representación gráfica la
separación de color se logra mediante distintos recurso; así, en la serigrafía
se realizan los negativos tramados por cada color y un negativo también con
trama para la tinta negra, en la litografía igualmente se pueden realizar los
negativos o se puede trabajar directamente la plancha o piedra con el color que
se requiere, al igual que puede hacer el artista sobre las sedas en la
serigrafía, para lograr el trabajo artístico. El fotograbado también requiere
del uso de negativos o acetatos tramados, o tener una trama, para cada lámina fotosensible
a la luz a la que recurrirá el artista en la separación de color utilizada en esta
técnica. La electrografía, la lasergrafía, la compugrafía o neográfica engloban
las técnicas actuales y requieren de programas para computadora; la neográfica se
estampa en Inyección de tinta o impresora Iris, por lo que el color lo
determina el software usado por el
artista.
Finalmente en la faxografía y la heliografía la impresión
se encuentra sujeta a tecnología moderna pero, para el proceso de impresión se
limita a las tintas que estos procesos de reproducción arquitectónica
restringen, sin embargo la imaginación del autor y la genialidad del artista es
la que crea mediante estas técnicas verdaderas obras de arte; ya sea a partir
de una sola tinta o por medio de la impresión a cuatro colores.