Quiere beso, Monotipo.
copy right Carmen alarcón
Ni por asomo, Monotipo
copy right Carmen Alarcón
A la prima…
Por Carmen Alarcón Collignon
En el número anterior me extendí acerca de la técnica del Moku Hanga, al igual que iba a continuar ahora abundando en el tema; ya estaba lista mi investigación, el texto dispuesto para grabarse en un disco y justo cuando estaba abriendo el archivo “tronó” mi disco duro externo, por este motivo tuve que dejar a un lado el tema anterior y abordar otra técnica: la monotipia. Debo decir que los primeros monotipos conocidos se le atribuyen al grabador impresor italiano Giovanni Benedetto Castiglioni en los inicios del Siglo XVII, realizados con la técnica sustractiva, Castiglioni entintó con un rodillo la placa de metal, quitó la tinta para dibujar la imagen con trapos, algodón o rasco con el mango de un pincel y otras herramientas que debió tener a la mano en el taller: brochas, pinceles, lápices, todo lo que le permitió lograr la imagen deseada, las imprimió en el tórculo calcográfico. Muy popular en Europa, es hasta el 1800 cuando un determinado número de artistas en América también empezaron a trabajar esta técnica, a la fecha continúa el interés por la Monotipia.
La monotipia es una técnica a la prima, espontánea, permite que la trabajemos con gran libertad al elegir los materiales o las herramientas con las que se va a realizar. Se utiliza para su elaboración toda clase de materiales solubles en agua, óleos o tintas para gráfica. La gran variedad de medios que se utilizan para hacer una monotipia, así como la mezcla de la técnica con otras técnicas de pintura o grabado hace que sea uno de los procedimientos más cercanos a la pintura. Para realizar una monotipia es necesario que nos familiaricemos con el método, debemos conocer los términos que se utilizan y las características de los materiales y herramientas.
Para realizar la monotipia también utilizamos placas, de metal, madera, vidrio, papel y plásticos. Las placas de metal son las más duraderas y las más caras, las de Mylar o de Plexiglas son las que a mí me han dado mejor resultado; los tamaños de las placas van de acuerdo a la obra que queremos realizar y a la disposición para imprimir a mano o en tórculo, el papel puede ser de cualquier tamaño, igual, mayor o menor que la plancha; la imagen puede cubrir enteramente el papel o puede tener un margen de papel blanco en el que se percibe las marcas en relieve que deja el bisel de la placa al pasar bajo la presión de la prensa. Para imprimir una monotipia con el tórculo es necesario que el papel sea previamente humedecido para que no se dañe con las orillas de la placa.
La trasparencia de una lámina de Plexiglas o de Mylar es una de las ventajas que este material ofrece por sobre otros, nos permite tener un dibujo como guía y ver cómo vamos avanzando nuestro trabajo. El Mylar lo podemos adquirir en los comercios que se dedican a la venta de producto para las artes gráficas y es una alternativa más económica que el Plexiglas; es lámina delgada que requiere lo montemos, sí pretendemos que nuestro trabajo tenga biseles lo podemos pegar con adhesivo en aerosol a una plancha delgada de MDF o a una cartulina gruesa. El Mylar se encuentra en los comercios en rollos de distintos tamaño, lo podemos adquirir autoadherible para hacer plantillas o pegarlo sobre otro material; además de ser un excelente soporte para hacer monotipos también podemos incidir en él y lograr líneas similares a la punta seca o incisiones parecidas al linograbado, esto hace que sea un material versátil que nos permite hacer técnicas mixtas y lograr mayor expresividad.
Cuando usamos el triplay como sustento de la monotipia tenemos una característica que dota a nuestro trabajo de un acabado único: la veta de la madera, así si nuestro soporte es triplay de pino o de caoba, tendremos diferente veta al realizar el entintado, proceso y estampación. Si queremos utilizar una plancha de aglomerado para hacer nuestro trabajo, es necesario considerar que este material no tiene mucha resistencia a la humedad y tiende a deformarse, para evitar que se deteriore rápidamente es recomendable cubrirlo totalmente con laca en aerosol brillante o con esmalte acrílico también en aerosol; también se puede dar una capa de imprimatura de gesso.
Para llevar a cabo nuestro proyecto podemos usar muchos materiales que enriquecerán nuestro trabajo, una gran variedad de texturas que logramos utilizando papeles gruesos, texturizados, cartones corrugados, lija…los pegamos al soporte con acrilato y sellamos con el mismo material para que no se desprenda con la humedad del papel en el que vamos a hacer la estampa, también es posible sellarlo con esmalte acrílico en aerosol y dejarle textura.
Cómo materiales pictóricos podemos usar prácticamente todos los utilizados en pintura y gráfica, debemos tener claro lo que queremos lograr para seleccionarlos, también no perder de vista que si hacemos nuestro monotipo con materiales a base de agua, usaremos el agua como solvente, pero si son materiales base aceite tendremos que utilizar solventes y trabajarlos en un área ventilada.