Arte urbano o arte
callejero…
Por Carmen Alarcón Collignon
Delfina
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El esténcil es una representación artística que deliberadamente irrumpe en el espacio público para llamar la atención, es un grito en espera del silencio que desaparece al ser tachado, repintado o simplemente, recreado por otro artista urbano. Es una representación anónima y mundana que se aloja en las calles en espera de la mirada dirigida por los transeúntes. No necesita exhibición ni galería, no espera el halago ni el desprecio, simplemente ahí está.
Los esténciles, generalmente suelen estar plagados de divulgaciones
subversivas, políticas y sociales, estas imágenes se extienden a lo largo de
las grandes urbes, son mensajes que estimulan a la reflexión mediante la ironía
y el humor. Es una forma de participación de arte urbano, en la que el artista
se apodera del espacio público para intervenirlo con las estampas generadas a
partir del esténcil.
Esta práctica, también es conocida como estarcido, la
forma en que se realiza el estampado es a partir de una plantilla con el dibujo
recortado, la cual sirve para aplicar la pintura a través de los recortes y
obtener la imagen sobre la superficie seleccionada. Al elaborar el dibujo para
realizar un esténcil se busca reducir el resultado visual a sombras, luces y
contornos, simplificando así el efecto al eliminar los medios tonos y disponer
sólo de elementos gráficos contundentes.
Para producir la plantilla es necesario recortar el proyecto
en una cartulina dura o, con muy buenos resultados, en estireno; con una
cuchilla de corte son sustraídas, del material las zonas sólidas del dibujo
para que aparezcan huecas y dejen pasar la pintura; así el diseño queda
limitado a la forma de los huecos que constituyen la plantilla; ésta puede
fijarse a la superficie con cinta adhesiva
o de embalaje, lo que facilita el estarcido.
El esténcil puede emplearse sobre cualquier superficie
plana: tela, madera, seda, metal, así como sobre muros y techos; son las bardas
perimetrales de los terrenos baldíos una de las superficies más recurridas para
recibir la estampación del esténcil. Sin embargo la superficie queda supeditada
al tipo de pintura con el que se llevará a cabo el proyecto. Generalmente se
utiliza pintura acrílica, por lo tanto es recomendable utilizar pinceles de
pelo corto redondos especiales para la técnica del estarcido, también es válido
recurrir al uso de brochas, esponjas, cepillos, estarcidores de boca y pintura
en aerosol.
Mencionar un poco de historia acerca de la técnica obliga
a señalar que desde la antigüedad el estarcido ha sido usado para decorar, ya
en la antigua Roma era empleado para adornar muros y frisos, también conviene anotar
que China utilizo las plantillas para decorar techos y paredes, así como
textiles y grabados a color. En Europa durante la
Edad Media se utilizó para repetir motivos
de ornamentación en las ilustraciones de los manuscritos y en los albores del
siglo XVIII para ornamentar porcelana y tapices.
Si bien el esténcil es una técnica muy antigua de
estampado, se ha convertido actualmente en una nueva y moderna forma de
expresión estrechamente vinculado a la serigrafía y al uso de programas de
manipulación de imagen en computadora; para generar imágenes planas fáciles de
recortar. El esténcil también es conocido como “arte callejero” por la expresión
en inglés street art, sin
embargo este término engloba todas las manifestaciones desarrolladas en el
espacio público urbano como: el graffiti, el tag y el sticker. El
esténcil comprende una representación plástica y una experiencia artística urbana,
que genera distintas lecturas cuando se desarrolla en el espacio público, en la
calle. Los códigos comunicacionales que surgen a partir del esténcil como arte
urbano divulgan una idea. Por tal motivo, además de ser una representación estética
de arte urbano, tiene la cualidad de ser: arte múltiple cuya finalidad es
comunicar, denunciar, expresar…
El interés por encontrar nuevas formas de expresión a
partir de elementos contraculturales obliga al artista a usar el ingenio, lo
que significa trabajar solo o en grupo, le compromete a penetrar y fragmentar
el paisaje urbano proponiendo lenguajes contestatarios sin otro fin que el de
expresar desde su semántica visual una lectura paralela a la de la calle. En
fin el esténcil es un movimiento cultural que se apropió de la ciudad al igual
que las demás manifestaciones de arte urbano, sin embargo el esténcil encuentra
escenarios de información diferentes a las otras manifestaciones estéticas
urbanas. La proliferación de los esténciles en la vía pública de las grandes
ciudades es una de las formas de cultura actual marcada por la globalización,
para penetrar y difundir estas manifestaciones los diseñadores requieren de las
nuevas tecnologías de la información; así como el acceso a Internet es determinante
para conocer los ismos culturales actuales también lo es para la propagación de
estas imágenes, para formar redes entre los grupos de artistas que intercambian plantillas por
medio de la Red y
lograr establecer un tejido de estampas a lo largo de varias ciudades y generar
una lectura global. Es una forma de comunicación horizontal que entrelaza a los
distintos hacedores de esténcil y los conecta con otros artistas urbanos en una
red de lenguajes visuales. Este vínculo está determinado por la cultura visual
y generalmente establecido entre los diseñadores egresados de las carreras
insertas en el ámbito de la imagen.
En definitiva, los discursos sociales del esténcil
adquieren sentido mediante la relación que guardan con el contexto donde son
destinados. El lenguaje visual que les rodean, los espectadores y la
arquitectura que los ostenta le confieren significación. Es claro que cada
esténcil tiene su propia semántica cuya eficacia se fundamenta en la
transmisión clara del mensaje. Las imágenes generadas por el artista a través
del esténcil pueden ser únicas o repetirse, conformar un mural a lo largo de
una o varias ciudades y así generar un discurso estético global.